Putos y bolches, docta y subversiva

06.06.2024

Arturo Jaimez Lucchetta

Fotograma del filme: El silencio es un cuerpo que cae
Fotograma del filme: El silencio es un cuerpo que cae


La ultraderecha en el poder, apologista de la dictadura, da miedo. Los derechos humanos están en peligro. Los derechos civiles y sociales también. La homofobia, la misoginia y el odio a lo colectivo que preconiza, es un deja vu del "proceso".

Nuestra Córdoba se pliega mayoritariamente.

Pero también se agitan las banderas de la Reforma Universitaria y el Cordobazo en "La Docta", y también la resistencia de las comunidades LGBTQ+.

La diversidad es una vanguardia. No tiene medias tintas, porque si no se lucha se muere.

"Cuando la dictadura terminó con la guerrilla y los militantes, los calabozos se llenaron de putos", cuenta un entrevistado del documental 'El silencio es un cuerpo que cae', de la directora Agustina Comedi. La película muestra la clandestinidad sexual y política de su padre gay y comunista, secreto que descubrió luego de su muerte. Ese silencio que nos interpela a todos, porque no existe familia que no los tenga.

Comedi usa las 160 horas de filmaciones que su papá, Jaime, guardaba celosamente, parte de aquella juventud. Esas cintas que Monona, su mamá, sabía que la hija no tenía que ver, todavía. Un silencio temeroso o quizá protector. La autora cuenta la historia en off, no opina, no juzga, sólo acompaña las imágenes y los sonidos de ambiente que también aportan lo suyo. Algunos subtítulos aclaran oportunamente que hay testimonios anónimos de amigos de Jaime, que prefirieron preservar sus identidades. El miedo sigue presente, 40 años después.

Los testimonios son emocionantes, crudos y, a veces, contradictorios. Algunos no quieren contar todo y piden que apague la cámara cuando están a punto de cruzar algún límite. Ella va sola, sin camarógrafo, monta todo sola, para lograr el clima intimista que consiga el testimonio que busca.

Todo emula aquella pesadilla. Para ellos no es pasado. Para nosotros tampoco.

Ser gay, lesbiana o travesti era subversivo, para el señor militar. Lo sigue siendo. La democracia, la libertad y el destape crearon comunidades artísticas que visibilizaron su lucha, pero no terminaron con la discriminación. Si bien las leyes de matrimonio igualitario e identidad de género fueron avances, hoy se interpelan y hasta se amenaza con derogarlas, a fuerza de decretos monárquicos o legisladores pusilánimes.

'Los maricones', documental de Daniel Tortosa, argumenta esta triste realidad: "Había razzias policiales a pleno día, nosotros no hacíamos nada. Solo salíamos a yirar, sabíamos que en este lugar había levante, lo aprendíamos en la calle. Nos guiñábamos el ojo, nos hablábamos y nos íbamos. La policía venía y nos llevaba a la D2, se adjudicaban la condición de jueces morales".

Vanesa Piedrabuena, primera mujer con DNI trans en Córdoba, es una de las protagonistas del filme y expresa el orgullo de haber sentado jurisprudencia para todos los que vinieron detrás, también advierte sobre un presente que pone en peligro todos los derechos adquiridos.

Memoria verdad y justicia.

Los juicios de 1985, las megacausas de los dosmiles y las leyes de equidad, nos transformaron en ejemplo para el mundo. El país que juzgó a sus genocidas, el que hizo que pagaran en la cárcel, justicia mediante, los que ejecutaron sin juicio, los violadores y ladrones de niños. La nación que le dio los mismos derechos a todas las diversidades. La patria de la educación pública y gratuita; la de la salud pública y gratuita. ¿Qué nos pasó? ¿Cómo ha pasado?

Córdoba fue y es protagonista. De Jerónimo Luis al Manco Paz, de la "Reforma" al "Cordobazo", de la "Fusiladora" al "70/30". Del costado que se la mire, con odio o con orgullo, será siempre de putos y bolches, docta y subversiva.



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